Liposucción (Lipoescultura)
Esta consiste en la eliminación de depósitos grasos en el cuerpo utilizando una cánula que se conecta a una bomba de vacío. La cánula se introduce al cuerpo a través de pequeñas incisiones en la piel. Como resultado el paciente adquiere una apariencia más armónica y refinada.
Es muy importante entender, que no es un método para bajar de peso. Aunque no es un tratamiento para obesidad, se remueven acúmulos de grasa persistentes y no deseados de manera selectiva. Estos acúmulos se localizan por lo general en áreas que son resistentes a dieta y ejercicio como son la cara, el cuello, las mamas, el abdomen, los brazos, las caderas, los muslos las rodillas y tobillos. Se puede realizar en diferentes áreas simultáneamente – su cirujano sabrá las indicaciones y limitaciones con respecto a los volúmenes de grasa a remover simultáneamente durante un solo procedimiento.
Aunque el objetivo es modelar en el cuerpo y reducir volúmenes, NO es un procedimiento para bajar de peso. Los resultados pueden no ser muy evidentes por seis meses después del procedimiento. Durante este periodo, el cuerpo hace un nuevo balance de líquidos y la piel y tejidos subcutáneos se van remodelando. El resultado final depende también de una nutrición adecuada, hacer ejercicio y disminución de la ingesta de calorías. Usted debe saber que para obtener un buen resultado su piel debe poder retraerse de manera adecuada, de otra forma será necesario resecar la piel sobrante posteriormente para evitar que esta se cuelgue. Las incisiones para vías de acceso de la cánula se hacen en áreas cubiertas por vello o en pliegues de piel naturales. A continuación se infiltra una solución llamada tumescente para saturar con líquidos la grasa a succionar. Esta solución confiere anestesia a dichas áreas y limita de manera importante el sangrado durante el procedimiento.
Una vez infiltrada el área elegida se procede a succionar la grasa utilizando la cánula conectada a la bomba de succión. La duración del procedimiento depende de la cantidad total de grasa a succionar. Al final del procedimiento se suturan las incisiones por lo general o se dejan a cicatrizar espontáneamente. Comúnmente se le aplicará una faja de compresión por algún tiempo posterior al procedimiento.
Aunque la recuperación es fácil puede esperar algo de goteo residual a través de las incisiones, formación de moretones y ligeras molestias. La faja ayuda a disminuir esto y a facilitar la retracción de la piel en las áreas tratadas. Mientras que parte del resultado se aprecia inmediatamente la forma y contorno finales irán mejorando al ir disminuyendo la inflamación. Deberá iniciar su actividad física al día siguiente de la cirugía e ir aumentándola gradualmente. Normalmente actividades que requieren mínimo esfuerzo se podrán realizar entre tres y cinco días y ejercicio intenso entre dos y cuatro semanas. Usted es un buen candidato para este procedimiento si goza de buena salud, desea mejorar el contorno de su cuerpo y entiende que esta no es una cirugía para bajar de peso.
El procedimiento se lleva a cabo bajo anestesia local y sedación o anestesia general y de manera ambulatoria por lo general. Los riesgos específicos y detalles para cada paciente solo se pueden determinar durante la consulta preoperatoria. Todos los procedimientos quirúrgicos presentan algún grado de riesgo de complicaciones. Ocasionalmente se presentan complicaciones menores que no afectan al resultado final. Complicaciones mayores son muy raras.

